Este fotografo, Jim Kazanjian crea construcciones imposibles, estructuras que más de un profesor de la escuela miraría como inviables...
A mí me parecen bellas y me recuerdan a los dibujos que hacía un alumno de mi escuela para el pequeño librillo de poesía que distribuye mi universidad. Dawid.
También me viene a la memoria al Castillo ambulante de Hayao Miyazaki del que ya hablé al principio del blog.
Tendrán todos inspiración divina conjunta?